como no puedo empezar la semana de mejor forma, el subte linea d decide dejarme afuera, junto con tantos otros transeuntes, de su brillante servicio.
por si no lo sabían tengo mucha mala suerte, si no se los dije antes ya es hora de que se enteren, por las dudas.
decido tomarme su otro amiguito de servicio, el de la linea b. y Ohh, maravillosa sorpresa numero dos,,.. tambien andaba para el carajo! genial, soy toda uan dama. La cuestion es que estas cosas me sacan de quicio, mas cuando es lunes, estas empezando la semana (para el orto), estas hiper dormido y ohh, tambien tenes muchas cosas que estudiar, muchas.
a una persona simpatiquisima no se le ocurre mejor forma de cagarme el dia que descomponerse. con lo cual el subte andaba lento. Llega la estacion medrano y había un tipo con una mirada un tanto extraña que parecía quedarse mirándote como si fueses su peor enemigo.asan unos 5 minutos y todo igual. el subte decide moverse y el tipo de la mirada rara clava sus ojos en mi, changos, mil años de maldicion.
no solo eso sino que tabien descubrí que la gente no se baja nunca, pero NUNCA y es imposible conseguir lugar, peor que en la linea d señores, mucho peor.
A otra señora simpatiquisima no se le ocurre mejor actividad que mascarme chicle en el oido y complotarse con un señor que estaba atrás mío, si, atrás mio, tosiendo como un condenado hijo de puta. A todo esto me ponía nerviosa que las puertas se cerraran y abriesen todo el tiempo porque personas con menos de media neurona quemada no se le ocurría otra cosa que acumularse fretne a la puerta y tomarse toda la bella mañana para subir y trabar las entradas con sus bolsos gigantes. a todo esto habia un tipo que media mas de dos metros ocn un cuerpo de rugbier y ya estaba deseando que su linda trencita que le colgaba de la cabezaa fuese agarrada por la puerta.
Me desconecertaba realmente que un pibe pudiese leer entre tanto quilombo y subrayar con un resaltador amarillito unas pequeñas fotocopias, fabuloso don.
estaba llegando a pasteur y pensaba como cuernos bajarme de ahí, ya que a todo esto los vagones son el doble de largos y tuve que atravesar un mar de gente un poco mas grande que el del linea d.
Mis "pensamientos" fueron interrumpidos cuando la típica vocecita de subte anuncia con hiper tranquilidad, como si nada hubiese pasado que "la linea d brinda un servicio limitado entre las estaciones congreso de tucuman y pueyrredon, sepan disculpar las molestias".
que sepa disculpar las molestias LA CONCHA TUYA
No, no te disculpo un carajo!
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